La discusión del presupuesto público en ciencia y tecnología 2017 en el Congreso puso en el tapete una conversación permanente al interior del equipo coordinador de RIECH. Desde nuestras distintas afiliaciones institucionales y experiencias, entendemos que no hay una política país en torno al rol de la ciencia y tecnología en el desarrollo de Chile, lo que se traduce en que el financiamiento en investigación no coincida con los desafíos y propuestas señaladas por los gobiernos. Iván Salinas, académico de la Universidad de Chile y parte del equipo coordinador de RIECH, señala que si el presupuesto país es limitado en ciencia y tecnología, lo es aún más para la investigación en educación.”Analizamos todos los proyectos FONDECYT regulares aprobados en el periodo 2005-2015, y nos dimos cuenta que solo el 4.2% de estos proyectos fueron destinadas a proyectos en el área de educación”, precisa Iván. Para referencia, FONDECYT es el principal mecanismo de financiamiento en investigación en Chile y representa alrededor del 40% del presupuesto de CONICYT 2017.
Por primera vez, algunos integrantes del equipo coordinador de RIECH se pronunciaron al respecto en una columna publicada recientemente en el diario electrónico El Mostrador y también una carta enviada al diario La Tercera. A raíz de este mensaje, RIECH fue invitado a participar en el programa “Siempre es Hoy” en radio T13, conducido por la periodista Carola Urrejola, el pasado lunes 21 de noviembre.
De izquierda a derecha, Daniela Veliz, Carolina Urrejola, y Ana Luisa Muñoz.
Daniela Véliz, académica de la Universidad Católica (PUC), y Ana Luisa Muñoz, académica de la Universidad Andrés Bello (UNAB), ambas integrantes del equipo coordinador, participaron de la entrevista, en la cual se refirieron a las disonancias entre los programas que financian el desarrollo de la investigación en Chile. “Por un lado, el gobierno incrementa el número de becas de postgrado en Chile y en el extranjero; por otro lado, los recursos asignados parecen insuficientes para apoyar la carrera de investigadores que, habiendo sido financiados por el Estado, buscan empleo en el mercado laboral chileno”, comenta Ana Luisa Muñoz.
En la conversación, Daniela y Ana Luisa plantearon la urgente necesidad de desarrollar de una política científica, cuyo proceso de elaboración incluya a la ciudadanía. En su opinión, las integrantes del equipo coordinador subrayan que la única forma que el desarrollo científico tenga un poder transformador es que el proceso de discusión de la política sea democrática y participativa. Las académicas subrayaron que el incremento de presupuesto en ciencia y tecnología es un paso necesario; pero no suficiente si la aspiración es que la ciencia y tecnología tenga un rol primordial en la agenda política del país.